Los mismos que amenazan a Eduardo Casanova son los mismos que ensalzan al Carcenal Cañizares por su modelito ostentoso de la Iglesia prepotente española. Contra gustos colores, te puede gustar o no, la vestimenta del Eduardo Casanova pero nunca amenazar a nadie por ser o vestir diferente. Por desgracia la gente está votando «España rancia», sus hijos se lo agradeceran.