
Si se parte la foto en dos, dejando en una a la Ayuso pensando sola y en la otra parte a los tres con mascarilla, sería de mucha imaginación decir que las dos fueron tomadas en el mismo momento y en la misma habitación. Con Ayuso todo es posible, ella a su rollo, sin mascarilla y pensando en las próximas absurdidades que nos va a contar.