
Por desgracia en este País somos más de rezar, si el dinero que el gobierno regala a la Iglesia sirviera para quitar impuestos sobre la industrias energéticas otro gallo cantaría.
Por desgracia en este País somos más de rezar, si el dinero que el gobierno regala a la Iglesia sirviera para quitar impuestos sobre la industrias energéticas otro gallo cantaría.